La Dirección Adjunta Operativa ha activado el III Plan de Acción contra los Delitos de Odio, una estrategia nacional que guiará a la Policía Nacional hasta el año 2028. Este nuevo plan responde a la necesidad de reforzar la prevención, la investigación y el acompañamiento a las víctimas, en un contexto donde los delitos de odio han adquirido mayor visibilidad y complejidad.
Seis líneas estratégicas de actuación
El plan establece seis grandes bloques de actuación:
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Apoyo integral y especializado a las víctimas.
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Prevención de los discursos y delitos de odio.
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Formación continua y sensibilización de los agentes.
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Colaboración directa con entidades sociales.
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Seguimiento coordinado de investigaciones.
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Refuerzo de medios humanos y materiales.
Coordinación a nivel nacional y territorial
A nivel central, la Unidad Central de Participación Ciudadana (UCPC) liderará el despliegue, actuando como núcleo de coordinación e interlocución institucional. En cada Jefatura Superior se designará un Coordinador Territorial, normalmente el Delegado de Participación Ciudadana, para garantizar que el plan se aplica de forma eficaz y homogénea en todo el país.
Implicación de todas las áreas policiales
Reparto de funciones entre las diferentes comisarías
Cada unidad de la Policía Nacional desempeñará un papel clave:
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La Comisaría General de Información asumirá las investigaciones más sensibles.
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La Policía Judicial mejorará la identificación de víctimas en denuncias.
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Seguridad Ciudadana promoverá la mediación en conflictos y el papel del interlocutor social.
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La Comisaría de Extranjería actuará ante situaciones de discriminación hacia personas migrantes.
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La Oficina de Comunicación liderará campañas de sensibilización pública.
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La División de Formación y Perfeccionamiento integrará contenidos específicos sobre delitos de odio en los planes de estudios de acceso, ascenso y formación continua.
Supervisión operativa y vinculación institucional
La UPEC, como órgano dependiente de la DAO, será la encargada de impulsar y supervisar el cumplimiento del plan, además de establecer los grupos de trabajo y centralizar la información obtenida desde las diferentes áreas funcionales.
El papel de las Jefaturas Superiores en la aplicación territorial
Las Jefaturas Superiores deberán poner en práctica todas las medidas que no sean exclusivas de órganos centrales. Entre sus tareas se incluyen:
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Organizar reuniones con colectivos vulnerables y ONG.
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Controlar la atención adecuada a víctimas.
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Verificar la correcta grabación de denuncias.
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Trasladar hechos relevantes a la Fiscalía especializada.
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Emitir informes de seguimiento de forma semestral.
El III Plan de Acción contra los Delitos de Odio representa un compromiso real por parte de la Policía Nacional con los derechos humanos y la protección de quienes sufren por su identidad, origen o creencias. El enfoque es claro: reforzar la prevención, especializar la intervención y mejorar la coordinación institucional para erradicar este tipo de conductas en todos los niveles.
En Academia Geopol estamos comprometidos con la formación de futuros agentes que conozcan, comprendan y apliquen este tipo de planes con profesionalidad y humanidad. Porque servir es también proteger a quienes más lo necesitan.
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